
Puede que la pérdida de millones de euros de un organismo público, cómo lo es la banca central de los países desarrollados, parezca un asunto menor sin mucha importancia. Pero, la realidad es que está descapitalización puede tener graves efectos secundarios en la economía global, advierten los analistas y agencias de rating. ¿Caerá en quiebra el BCE?
Si bien, cómo último recurso, los gobiernos podrían inyectar capital en los bancos centrales para solventar las pérdidas, esto podría reducir su independencia y terminar generando una situación de dominio fiscal que termine por romper la frontera entre la política fiscal y monetaria, si es que todavía sigue existiendo.
¿Cuál es la situación del BCE?
La fuerte subida que el BCE está llevando en los tipos de interés para combatir la inflación sería la responsable de generar las pérdidas millonarias. Esto, ya que el BCE o la FED tienen su balance lleno de bonos que pagan unos intereses muy bajos, incluso rayando en el interés negativo, mientras que su pasivo tiene billones de liquidez aparcada por los bancos comerciales.
En otras palabras, las FED y el BCE están pagando miles de millones de euros a los bancos por tener su dinero aparcado en el banco central, al mismo tiempo que no reciben, prácticamente, nada por la deuda pública y privada que tienen en su balance. Así que, si está situación continúa extendiendo podrían poner en un verdadero aprieto a los gobiernos e instituciones monetarias.
Si bien, inicialmente, la distribución de los beneficios a sus tesoros nacional hecha por los bancos elevó la capital de los involucrado, la acumulación de activos en los balances de los bancos centrales que se ha dado en los últimos años ha hecho que, según especialistas, los bancos centrales tengan pérdidas durante 1 a 2 años.
¿Es posible que el BCE entré en quiebra?
Los bancos centrales pueden continuar operando con posición capital negativa, pero, si se sienten incómodos y necesitan ser “rescatados” después de presentar grandes pérdidas, se podría percibir cómo una mayor presión política sobre la institución monetaria para emprender actividades cuasifiscales, potencialmente influyendo en su credibilidad política.
Entonces, los bancos centrales que poseen un monopolio sobre la creación del dinero no podrían quedar de manera técnica, ya que pueden capitalizarse a sí mismos imprimiendo más dinero de forma electrónica. Aunque, una situación cómo la que actualmente está pasando el BCE actualmente puede influir negativamente en su credibilidad, dependiendo la manera en que remedie sus problemas.
Los problemas de la BCE
ING informa que el BCE estaría dispuesto a pagar una suma de dinero mayor a los intereses a los bancos, sobre los casi 4,6 billones de euros de exceso de liquidez en circulación en el sistema bancario. Pero, el problema de esto es que el BCE ha proporcionado este exceso de liquidez en préstamos anteriores de operaciones de refinanciamiento a largo plazo a bancos con un tipo de interés promedio mucho más bajo.
Los ajustes contables a precios de mercado ya han provocado varias pérdidas grandes en otras entidades cómo el Banco Nacional Suizo (SNB) y el Banco de la Reserva de Australia (RBA), con este último recibiendo incluso un patrimonio negativo. Así que, si bien la mayoría de bancos centrales tienen colchones que le permiten mantener él reparto de dinero a los gobiernos, incluso con sus pérdidas, la escala y velocidad de los movimientos del mercado pueden desbordar las reservas, poniendo en peligro los ingresos que estos bancos reciben de los gobiernos.